
Desde el seis de febrero, la imagen de San Judas se halla repuesta al culto en el atrio de la Real Iglesia de San Antonio Abad, en un emplazamiento provisional, hasta que en la zona donde se venera habitualmente finalicen los trabajos de restauración.
Como novedad, y para garantizar la seguridad del recinto, solo se podrán colocar ante San Judas, flores o velas, y si optan por colocar velas, solo deberán ser las facilitadas en la tienda de recuerdos de la Hermandad del Silencio, absteniéndose de depositar otras velas.